Este verano se están sucediendo las olas de calor y el debate sobre el cambio climático está saltando de nuevo a la palestra. Uno de los temas recurrentes en este sentido es la sequía que se vive en España. Así, están adquiriendo gran notoriedad en redes sociales mensajes como el siguiente: “¿Dónde está la sequía? Nuestros embalses están hoy día mucho mejor que el peor año de la historia (1995)”. La publicación va acompañada por una captura de imagen de un gráfico con datos sobre las reservas hídricas del país.
En ella se muestra que el peor dato de reservas, de 1995, es del 25,2% de la capacidad. Además, a pesar de que el tuit se publicó el 20 de junio y de que los datos se actualizan de forma semanal, el último dato que ofrece es del 31 de mayo, cuando supuestamente los embalses estaban al 47,51%.
Es cierto que la cifra de las menores reservas hídricas es de 1995, como se dice en el mensaje. En concreto, del 7 de noviembre de dicho año, cuando hubo almacenados 12.765 hectómetros cúbicos de agua, según la información del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. La más reciente, del 25 de julio de 2023, es de 24.329.
Este último no es el peor dato. No obstante, desde 2013 se puede observar una tendencia generalizada de descenso de las reservas hídricas en España, con picos puntuales de mengua más exacerbada y otros de repunte.
Pero ¿en qué estado se encuentran actualmente las reservas hídricas del país? Aquí te damos todas las claves
Momento actual de las reservas hídricas en España
Es correcto el dato aportado por el tuit en cuestión: las reservas hídricas de España a 31 de mayo de 2023 estaban al 47,5%. Así lo corrobora el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico en esta nota de prensa, con la cifra actualizada a 30 de mayo. La cantidad de agua total embalsada era de 26.640 hectómetros cúbicos.
En la actualidad, aporta esta otra nota de prensa, con el último dato disponible, el 25 de julio, ya que la información se actualiza de forma semanal los martes, el porcentaje desciende al 43,4% y 24.329 hectómetros cúbicos, con un descenso del 1,27% con respecto a la semana anterior, según los datos del mismo ministerio.
Las mayores reservas hídricas se encuentran en la demarcación hidrográfica del Cantábrico Occidental, que están al 88,2% de su capacidad; las menores, en la del Guadalete-Barbate, que se encuentran al 20,2%.
En la actualidad, el agua embalsada total es más que el año pasado, cuando en la semana del 17 al 24 de julio había 23.521 hectómetros cúbicos, el 41,9% de la capacidad de los embalses, frente a las 24.329 de ayer, el 43,4%. Sin embargo, la media de la última década se encuentra en 33.673 hectómetros cúbicos, el 60%, alrededor de 9.300 hectómetros cúbicos más que este año. Todo según el Ministerio para la Transición Ecológica.
Descenso generalizado de las reservas hídricas desde 2013
Es cierto que julio de 2023 no presenta los peores datos de la serie histórica. Con datos recogidos desde enero de 1988, el gráfico del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico pone de manifiesto que los peores números son del 7 de noviembre de 1995, cuando hubo almacenados 12.765 hectómetros cúbicos. Aunque cabe destacar que las peores cifras suelen recogerse a partir de septiembre.
Asimismo, dentro de estos últimos diez años se ha conseguido el mejor dato de la serie histórica. El 28 de mayo de 2013 había almacenados 47.444 hectómetros cúbicos de agua, apuntan desde el ministerio. Sin embargo, a partir de entonces se puede observar un descenso generalizado en la gráfica elaborada por la institución.
Como se puede ver, los picos de máxima capacidad de las reservas hídricas en España, habitualmente situados entre marzo y junio de cada año, cada vez han sido menores desde 2013.
En cuanto al resto de máximos, el 15 de abril de 2014, la capacidad era de 46.518 hectómetros cúbicos; el 12 de mayo de 2015, de 44.192; el 17 de mayo de 2016, de 42.188; el 11 de abril de 2017, de 33.313; el 19 de junio de 2018, 40.868; el 14 de mayo de 2019; 34.043; el 26 de mayo de 2020, de 37.361; el 9 de marzo de 2021, de 36.018; el 10 de mayo de 2022, de 28.452; y el 28 de marzo de 2023, de 29.012.
Aunque hubo un repunte en 2018 y otro, menos pronunciado, en 2020, el descenso es generalizado durante esta última década. La mayor mengua se produjo entre 2016 y 2017.
De hecho, el mínimo del año 2013 se marcó el 1 de enero, con 30.872 hectómetros cúbicos almacenados. Este dato es mayor que el mayor de los años 2022 y 2023, hasta el 25 de julio. Aunque enero de 2013 recogía una tendencia ascendente desde el 16 de octubre de 2012, con 24.777.
Mínimos cada vez más exacerbados
De forma paralela, aunque el de ayer no es el peor dato de la serie histórica, el de 2022, en concreto, el del 18 de octubre, es el tercer peor número de la serie. En dicha fecha había almacenados 17.599 hectómetros cúbicos. La cifra solo es mejor que la del 7 de noviembre de 1995, con 12.765, y que el 14 de noviembre de 1989, con 14.989. Todo de acuerdo con la gráfica del Ministerio para la Transición Ecológica.
Como en los datos de máximas reservas hídricas, a pesar de repuntes en años puntuales, las mínimas se han ido agravando de forma generalizada desde 2013.
Según este mismo ministerio, el mínimo de 2013 fue el 1 de enero, con 30.872 hectómetros cúbicos; el de 2014, el 30 de septiembre con 34.804; el de 2015, el 27 de octubre con 30.759; el de 2016, el 22 de noviembre con 29.928; el de 2017, el 12 de diciembre con 20.475; el de 2018, el 16 de octubre con 29.001; el de 2019, el 22 de octubre con 22.313; el de 2020, el 20 de octubre con 25.278; en 2021, el 2 de noviembre con 21.897; en 2022, el 18 de octubre con 17.599; y en 2023, el 25 de julio, el último dato publicado, 24.329 (aunque, según los datos de la serie, los mínimos suelen darse a partir de septiembre).
Igualmente, el descenso más pronunciado fue de 2016 a 2017, y hubo un repunte en 2018 y otro, menos significativo, en 2020. Sin embargo, los números son, de forma generalizada, menores según avanza la década.
Fuentes
30 de mayo de 2023, nota de prensa del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico