Con la llegada del verano y las altas temperaturas, comienzan las actividades típicas de esta época: los campamentos de niños y las excursiones a la piscina. Situaciones en las que los más pequeños intercambian gorras, peines y otros complementos que entran en contacto con el cabello. Y a los padres les invade un terror: ¿cómo evito los piojos?
Los piojos son insectos parásitos que anidan en la cabeza de las personas, para sobrevivir se alimentan de la sangre humana. Generalmente, tienen el tamaño de las semillas de sésamo, aunque las liendres pueden ser más pequeñas. Se encuentran en el cuero cabelludo, con mayor frecuencia en el cuello y detrás de las orejas.
La farmacéutica Marta Masi declara que el picor en la cabeza se debe a una reacción alérgica provocada por la saliva de estos insectos. “No todas las personas presentan ese picor. Por ello, la ausencia de picor no es sinónimo de que no haya piojos, sino que es importante revisar visualmente la presencia de liendres y piojos”, señala la experta.
¿Cómo prevengo los piojos?
Existen lugares en los que se deben tomar medidas preventivas: campamentos, colegios, albergues, piscinas. Sin embargo, no está motivado por el sitio en sí, sino por las acciones de las personas. Marta Masi insiste en que debemos educar a los niños en la importancia de tomar precaución con respecto a compartir gorras, sombreros, gomas de pelo, toallas…
Declara que hacer entender esto a los más pequeños puede resultar ineficaz, o muy complicado. Por lo que sugiere el uso de productos repelentes como spray. Se pulverizan una vez al día, en todo el cabello. Los más recomendados son los que contienen IR3535 y octanediol, por su seguridad y eficacia. En cuanto al uso de aceite de árbol de té como prevención, a pesar de estar muy extendido, no hay evidencia científica clara que demuestre su eficacia.
Para evitar su aparición, la Asociación para el Autocuidado de la Salud (Anefp), recomienda revisar frecuentemente el cabello detrás de orejas y en la zona de la nuca con una lendrera. Limpiar con agua caliente los cepillos y peines. Asimismo, lavar la ropa de cama, toallas, gorros y bufandas usados por los niños a más de 50º de temperatura.
Los piojos van solo al pelo sucio
Es un falso mito. La higiene no está relacionada con mayor riesgo de coger piojos. De hecho, los piojos prefieren el cabello limpio. En un artículo de la Asociación para el Autocuidado de la Salud, «¿Cómo prevenir y eliminar los piojos?«, se explica que el contagio no está relacionado con la falta de higiene.
Frente a la creencia popular, los piojos no saltan ni vuelan para trasladarse de una persona a otra, sino que se contagian al desplazarse caminando. Por lo tanto, es el contacto directo con personas infectadas o con su ropa el que puede ocasionar el contagio.
El cabello largo y suelto facilita la transmisión de los piojos, cuyo principal síntoma es el picor, que puede llegar a ser muy molesto. Por lo que llevar el pelo recogido ayuda a su prevención.
Es mejor la técnica del vinagre y suavizante que los productos pertinentes
El vinagre no mata a los piojos. Lo ideal es usar productos con permetrina, un insecticida. El problema se encuentra en que los piojos han desarrollado resistencia a esta sustancia. La alternativa es el uso de productos a base de siliconas, que asfixian al piojo. Eso sí, puede que no termine en totalidad con las liendres. Para retirar liendres y piojos es imprescindible el uso de lendreras, a poder ser de metal y estriada.
Es importante, además de elegir un producto eficaz, utilizarlo tal y como aparece en las instrucciones de uso y repetir el tratamiento a los 7-10 días.
¿Pueden contagiarse los piojos al nadar?
Según el Centro para el Control y Prevención de enfermedades (CDC) los piojos pueden sobrevivir bajo el agua, pero no es probable que se transmitan a través del agua de una piscina. El nivel de supervivencia de los piojos fuera de la cabeza es relativamente bajo.
“Los piojos de la cabeza pueden propagarse a través de las toallas u otros artículos que hayan estado en contacto con el cabello de la persona infectada, aunque este tipo de transmisión no es muy común”, indican. Por tanto, el contacto en las piscinas está relacionado con la actividad de los niños, no con el contagio causado por el agua.
Se cogen por compartir peine y almohada
Es cierto. “Se transmiten por contacto personal directo y por compartir objetos como los sombreros y los peines o accesorios para el pelo”, afirma Marta Masi. También se pueden transmitir en almohadas o colchonetas como en las que duermen los niños en los campamentos. De ahí que sea tan frecuente que vuelvan con piojos al pasar unas semanas fuera de casa.
Fuentes
Declaraciones de la farmacéutica Marta Masi
Artículo de la Asociación para el Autocuidado de la Salud (Anefp)
Artículo del Centro para el Control y Prevención de enfermedades