Michelle Obama, Sanna Marin, Yolanda Díaz o Isabel Díaz Ayuso. Estas cuatro mujeres de ideologías tan dispares tienen en común que han sido, y son, objeto de informaciones falsas y bulos de forma periódica. Todas son víctimas de desinformación de género. De acuerdo con el Instituto Demócrata para los Asuntos Internacionales (NDI, por sus siglas en inglés), una organización estadounidense, la desinformación de género es el conjunto de actividades en línea que atacan o socavan a sus destinatarios en función de su género, utilizando para ello narrativas con objetivos políticos, sociales o económicos.
Estas campañas desinformativas de género tienen finalidades bien definidas: ensuciar el debate público y la expulsión de la mujer de los espacios, en este caso del espacio digital. Elisa García Mingo, profesora de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociología de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), explica que “realmente hay un conflicto, una pugna”, ya que el feminismo supone una disputa por el espacio público, especialmente de aquellos territorios que antes eran exclusivamente masculinos.
Para conseguir la igualdad, los hombres deben ceder ciertos territorios y renunciar a ciertos privilegios históricos. De hecho, esta experta apunta que cada vez que se producen determinados avances en el movimiento feminista, hay una cruzada antigénero, una campaña que ha calado, especialmente “entre los más jóvenes”, señalan desde el Centro Reina Sofía sobre adolescencia y juventud (FAD).
Los bulos van acompañados de violencia contra la mujer
Las redes sociales son la grieta por la que se cuela la mayor parte de la desinformación de género. Sin embargo, estos canales permiten que los bulos y las medias verdades vayan acompañados de violencia contra la mujer. Esta circunstancia tiene un gran impacto en la salud mental y la vida personal de este colectivo, especialmente para aquellas que tienen un perfil público, como las políticas, por ejemplo.
«Lo que distingue este tipo de violencia digital contra las mujeres de otro tipo de violencia es que los ataques no suelen basarse en una contraargumentación que cuestionen los discursos que se hacen en el feminismo sino que por lo general suelen ser ataques que van directamente a cuestionar la valía de las mujeres o cuestionar su autoestima», defendió Antonia Morillas, presidenta del Instituto de Mujeres, durante el seminario «Perspectivas feministas en la sociedad de la información».
La manosfera: cuando el machismo se extiende en internet
Este término, que procede de las palabras inglesas hombre (man) y esfera (sphere), se refiere a las comunidades digitales antifeministas. El elemento que vertebra estos espacios desinformativos son las emociones, “aquello que uno gana en el terreno emocional al creer la información falsa”, explica Elisa García Mingo.
“Estas cámaras ecoemocionales te permiten sentirte bien y que te apoyes en la comunidad. Muchos hombres tienen la ganancia emocional de que los malos son las mujeres, porque no soportan formar parte de algo (el machismo) que saben que está mal”, señala. Además, el componente emocional evita la reflexión, lo que facilita que la desinformación circule de pantalla en pantalla a gran velocidad, fomentando así la polarización en la sociedad.
Entre las estrategias que utilizan estas comunidades la FAD en el informe Jóvenes en la Manosfera destaca “la creación y puesta en circulación de los memes”. “Se emplea el humor como estrategia retórica y de debate para desafiar los argumentos del feminismo y plantear una agenda de debate político antifeminista”, agregan desde este organismo.
Otros trucos que emplean, según la experta Elisa García, son “repetir mensajes sencillos todo el tiempo, como Not all Men (no todos los hombres) o simplificar la información”. Otra táctica que emplean es la distorsión de la realidad al compartir solo los mensajes que concuerdan con lo que piensan, como el número de hombres absueltos de juicios o el tema de las denuncias falsas, y silenciar otros temas (en este caso, el número de mujeres víctimas de violencia de género)”.
Desde INFOVERITAS hemos verificado con anterioridad algunos bulos basados en narrativas misóginas y estereotipos de género, como este artículo, que desmiente que la exministra de Igualdad, Irene Montero, dijera que el hecho de que un hombre ganara las elecciones autonómicas en Galicia fuera machista.
Fuentes
Instituto Demócrata para los Asuntos Internacionales (NDI, por sus siglas en inglés)
Declaraciones de Elisa García Mingo, profesora de la facultad de Ciencias Políticas y Sociología de la Universidad Complutense de Madrid (UCM)
Declaraciones de Antonia Morillas, durante el seminario «Perspectivas feministas en la sociedad de la información»
Informe Jóvenes en la Manosfera del Centro Reina Sofía sobre adolescencia y juventud (FAD)