Circulan en redes sociales mensajes que relacionan la vacuna de la hepatitis B con el síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL), el fallecimiento inesperado y repentino de un niño menor de 1 año de edad, aparentemente sano, para el que no se encuentra explicación después de una investigación minuciosa.
Sin embargo, ni la vacuna de la hepatitis B ni el resto de vacunas producen SMSL. Hay múltiples estudios realizados en los que no se ha encontrado relación entre estas vacunas y el SMSL. Hasta la fecha el principal factor de riesgo es colocar al bebé boca abajo para dormir.
No existe relación entre las vacunas y el síndrome de muerte súbita del lactante
Lucía López Granados, miembro del Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría desmiente a INFOVERITAS que exista tal relación: “No, la vacuna de la Hepatitis B no está relacionada con la Muerte Súbita del Lactante.” “Múltiples estudios científicos y organismos oficiales han descartado cualquier relación causal entre la vacunación infantil, incluyendo la hepatitis B, y el SMSL”, agrega.
El Ministerio de Sanidad señala en este documento que lleva por título ‘Síndrome de Muerte Súbita del Lactante y vacunas’, revisado en febrero de 2021, que ni la vacuna de la hepatitis B ni el resto de las vacunas producen SMSL. “No existen estudios científicos que muestren relación entre las vacunas y el SMSL”, se indica en el texto. De hecho, agregan, en varios de los estudios, “los niños que habían recibido recientemente una vacuna DTP (Difteria, tétanos y tos ferina) tenían menos probabilidades de contraer SMSL.”
Desde el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés), añaden: “Múltiples estudios de investigación y revisiones de seguridad han analizado los posibles vínculos entre las vacunas y el síndrome de muerte súbita infantil (SMSI). Las pruebas acumuladas a lo largo de muchos años no muestran ningún vínculo entre la inmunización infantil y el SMSL.”
¿Por qué se relacionan las vacunas con el SMSL?
Lo que ocurre es que el SMSL suele ocurrir durante los primeros meses de vida, que coinciden temporalmente con el periodo en el que se administran las primeras vacunas a los niños. Pero este hecho es “solo una coincidencia con el calendario”, señala la experta.
La sospecha de que las vacunas podrían causar el SMSL ha venido porque algunos niños que han fallecido por SMSL habían sido vacunados, pero los grandes estudios han demostrado que la incidencia esperada es similar con o sin vacunación. “En otras palabras, las muertes por SMSL habrían ocurrido incluso si no se hubieran vacunado”, destacan desde el organismo.
Por tanto, insiste Lucía López: “No existen bases científicas que confirmen que la vacuna contra la hepatitis B ni otras vacunas infantiles incrementen el riesgo de muerte súbita del lactante”, indica Lucía López. Por ello, la experta destaca que la postura del Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría, en la misma línea de Salud Pública y otros organismos internacionales, es vacunar a los niños, puesto que este gesto protege de enfermedades graves y potencialmente mortales.
Colocar al bebé boca arriba para dormir reduce el riesgo de SMSL
Hasta la fecha, se desconoce la causa del síndrome de muerte infantil súbita. “Pero existen problemas en la parte del cerebro del bebé que controla la respiración y el despertar del sueño que pueden causarlo”, señalan desde la Clínica Mayo de Estados Unidos.
La principal forma de disminuir el riesgo de SMSL es colocar al niño boca arriba a la hora de dormir. Evitar el humo de tabaco en la habitación, los colchones blandos o el excesivo calor, pueden colaborar en la reducción del riesgo. La evidencia científica, recoge este centro médico, sugiere que la inmunización también ofrece un efecto protector contra el SMSL.
Además, se sabe que existe una asociación clara entre dormir boca abajo y el aumento de riesgo de muerte súbita. Otros factores, enumeran desde el Ministerio de Sanidad, como el tabaquismo pasivo, los colchones blandos, las almohadas o arropar al lactante de forma excesiva pueden aumentar el riesgo.
INFOVERITAS verifica que…
Ni la vacuna de la hepatitis B ni el resto de vacunas producen SMSL. Hay múltiples estudios realizados en los que no se ha encontrado relación entre estas vacunas y el SMSL. Hasta la fecha el principal factor de riesgo es colocar al bebé boca abajo para dormir.
Fuentes
Declaraciones de Lucía López Granados, miembro del Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría
Documento Síndrome de Muerte Súbita del Lactante y Vacunas elaborado por el Ministerio de Sanidad
Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés)
Clínica Mayo de Estados UnidosCirculan en redes sociales mensajes que relacionan la vacuna de la hepatitis B con el síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL), el fallecimiento inesperado y repentino de un niño menor de 1 año de edad, aparentemente sano, para el que no se encuentra explicación después de una investigación minuciosa.
Sin embargo, ni la vacuna de la hepatitis B ni el resto de vacunas producen SMSL. Hay múltiples estudios realizados en los que no se ha encontrado relación entre estas vacunas y el SMSL. Hasta la fecha el principal factor de riesgo es colocar al bebé boca abajo para dormir.
No existe relación entre las vacunas y el síndrome de muerte súbita del lactante
Lucía López Granados, miembro del Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría desmiente a INFOVERITAS que exista tal relación: “No, la vacuna de la Hepatitis B no está relacionada con la Muerte Súbita del Lactante.” “Múltiples estudios científicos y organismos oficiales han descartado cualquier relación causal entre la vacunación infantil, incluyendo la hepatitis B y el SMSL”, agrega.
El Ministerio de Sanidad señala en este documento que lleva por título ‘Síndrome de Muerte Súbita del Lactante y vacunas’, revisado en febrero de 2021, que ni la vacuna de la hepatitis B ni el resto de las vacunas producen SMSL. “No existen estudios científicos que muestren relación entre las vacunas y el SMSL”, se indica en el texto. De hecho, agregan, en varios de los estudios, “los niños que habían recibido recientemente una vacuna DTP (Difteria, tétanos y tos ferina) tenían menos probabilidades de contraer SMSL.”
Desde el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés), añaden: “Múltiples estudios de investigación y revisiones de seguridad han analizado los posibles vínculos entre las vacunas y el síndrome de muerte súbita infantil (SMSI). Las pruebas acumuladas a lo largo de muchos años no muestran ningún vínculo entre la inmunización infantil y el SMSL.”
¿Por qué se relacionan las vacunas con el SMSL?
Lo que ocurre es que el SMSL suele ocurrir durante los primeros meses de vida, que coinciden temporalmente con el periodo en el que se administran las primeras vacunas a los niños. Pero este hecho es “solo una coincidencia con el calendario”, señala la experta.
La sospecha de que las vacunas podrían causar el SMSL ha venido porque algunos niños que han fallecido por SMSL habían sido vacunados, pero los grandes estudios han demostrado que la incidencia esperada es similar con o sin vacunación. “En otras palabras, las muertes por SMSL habrían ocurrido incluso si no se hubieran vacunado”, destacan desde el organismo.
Por tanto, insiste Lucía López: “No existen bases científicas que confirmen que la vacuna contra la hepatitis B ni otras vacunas infantiles incrementen el riesgo de muerte súbita del lactante”, indica Lucía López. Por ello, la experta destaca que la postura del Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría, en la misma línea de Salud Pública y otros organismos internacionales, es vacunar a los niños, puesto que este gesto protege de enfermedades graves y potencialmente mortales.
Colocar al bebé boca arriba para dormir reduce el riesgo de SMSL
Hasta la fecha, se desconoce la causa del síndrome de muerte infantil súbita. “Pero existen problemas en la parte del cerebro del bebé que controla la respiración y el despertar del sueño que pueden causarlo”, señalan desde la Clínica Mayo de Estados Unidos.
La principal forma de disminuir el riesgo de SMSL es colocar al niño boca arriba a la hora de dormir. Evitar el humo de tabaco en la habitación, los colchones blandos o el excesivo calor, pueden colaborar en la reducción del riesgo. La evidencia científica, recoge este centro médico, sugiere que la inmunización también ofrece un efecto protector contra el SMSL.
Además, se sabe que existe una asociación clara entre dormir boca abajo y el aumento de riesgo de muerte súbita. Otros factores, enumeran desde el Ministerio de Sanidad, como el tabaquismo pasivo, los colchones blandos, las almohadas o arropar al lactante de forma excesiva pueden aumentar el riesgo.
INFOVERITAS verifica que…
Ni la vacuna de la hepatitis B ni el resto de vacunas producen SMSL. Hay múltiples estudios realizados en los que no se ha encontrado relación entre estas vacunas y el SMSL. Hasta la fecha el principal factor de riesgo es colocar al bebé boca abajo para dormir.
Fuentes
Declaraciones de Lucía López Granados, miembro del Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría
Documento Síndrome de Muerte Súbita del Lactante y Vacunas elaborado por el Ministerio de Sanidad
Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés)
Clínica Mayo de Estados Unidos