“¡No te bañes ahora que acabas de comer y te va a dar un corte de digestión!”. Cuántas veces habremos escuchado esta frase de la boca de nuestros padres. Está muy extendida la creencia de que debemos esperar mínimo dos horas después de las comidas para darnos un chapuzón en la playa o en la piscina y evitar así un corte de digestión. Sin embargo, ¿es cierta esta afirmación? En este artículo te desvelamos este y otros mitos del verano.
¿Puedo bañarme después de comer, sin hacer la digestión?
El doctor Pedro Viaño Nogueira, pediatra y miembro del comité editorial de En Familia, la web divulgativa dedicada a las familias de la Asociación Española de Pediatría (AEP), despeja esta incógnita. “El término popular ‘corte de digestión’ no está basado en la evidencia científica, aunque sí se recoge el concepto hidrocución”, señala. Esto consiste en vómitos, mareos o posibles desmayos provocados por una brusca inmersión bajo el agua “con riesgo de ahogamiento”, añade.
Pero no ocurre por bañarse justo después de comer, sino por el choque de temperaturas entre el cuerpo que suele encontrarse a una temperatura caliente y el agua fría de la piscina o el mar. De hecho, el riesgo aumenta tras una exposición solar prolongada o tras realizar ejercicio físico vigoroso. Pese a que no guarde relación directa con la digestión, puede darse la situación después de comidas muy copiosas. “Es raro que un niño haga comidas copiosas en verano, por tanto, la prohibición del baño en las dos o tres horas posteriores a la comida no tiene sentido”, leemos en el artículo de la web de la AEP.
Conviene mojarse la nuca y las muñecas antes de entrar en el agua
“Es conveniente que la inmersión sea paulatina para evitar el síndrome de hidrocución”, declara el doctor Pedro Viaño. Antes de entrar de golpe en el agua, sobre todo si está fría y la piel caliente, es preferible sumergirse paulatinamente.
Me puede dar una ola de calor si me echo una siesta al sol
Un golpe de calor no ocurre exclusivamente al realizar un gran esfuerzo. Las altas temperaturas también son un factor de riesgo. Por eso, durante los meses de verano debemos tener cuidado. Como indica este artículo de la Clínica Mayo, puede darnos un golpe de calor si estamos mucho tiempo expuestos en un ambiente caluroso, ya que suelen producirse cuando el cuerpo alcanza los 40ºC o más.
“A menudo, este tipo de insolación ocurre después de haber estado expuesto a un clima húmedo y caluroso, en especial durante períodos prolongados. Ocurre con más frecuencia en adultos mayores y en personas que padecen enfermedades crónicas”, puntualiza la clínica.
El pediatra Pedro Viaño explica cuándo se produce esta situación. “Un golpe de calor ocurre debido a un aumento térmico producido por una temperatura ambiental elevada que no se compensa con los mecanismos fisiológicos de termorregulación”, señala.
Y agrega: “El riesgo de sufrir un golpe de calor aumenta en los bebés, especialmente en los recién nacidos, y en aquellos niños con un riesgo incrementado de sufrir deshidratación, ya sea por aumento de las pérdidas hídricas (fibrosis quística, gastroenteritis) o por un acceso limitado al agua”.
¿Cada cuánto está recomendado que nos pongamos crema solar?
Es muy importante tomar el sol con responsabilidad. Uno de los riesgos a la exposición excesiva es el melanoma, el tipo de cáncer de piel más peligroso, o puede provocar quemaduras en la piel.
En el artículo ya publicado: ¿Existe la protección solar 100?, la farmacéutica Marta Masi declaraba que no es suficiente con una protección total “porque normalmente no aplicamos la cantidad suficiente para cubrir toda la piel y, además, no solemos reaplicar cada dos horas, como suelen recomendar los fabricantes de protectores solares para seguir manteniendo una protección solar óptima”.
El doctor Pedro Viaño concuerda con la farmacéutica en la frecuencia con la que se debiera reaplicarse la crema solar. Asimismo, recomienda el uso de factor de protección 50 antes que 30. Apunta que los menores de 6 meses no deben emplear crema solar ni estar expuestos a la radiación solar. Hasta los 24 meses sugieren el uso de protecciones específicos “únicamente filtros físicos, no químicos, idealmente water proof”, añade.
Fuentes
Declaraciones del doctor Pedro Viaño Nogueira, pediatra y miembro del comité editorial de En Familia, la web divulgativa dedicada a las familias de la Asociación Española de Pediatría (AEP)
Declaraciones de la farmacéutica Marta Masi para el artículo de INFOVERITAS: ¿Existe la protección solar 100?
Artículo de la Clínica Mayo: Golpe de calor
Artículo de En Familia, la web divulgativa dedicada a las familias de la AEP: Prevención de accidentes tiempo de piscina