Los mitos sobre el cambio climático son frecuentes en las conversaciones populares. Entre las mentiras más frecuentes encontramos la idea de que el cambio climático afecta al planeta, pero no a las personas. Sin embargo, las cifras lo desmienten. Hace ya más de medio siglo que se tiene constancia de las migraciones climáticas, desplazamientos por razones medioambientales, provocadas por contaminación, sequía extrema o lluvias torrenciales.
Se trata de un fenómeno que irá en aumento en los próximos años. Según la última edición de la serie de informes «Groundswell», del Banco Mundial, más de 216 millones de personas podrían desplazarse dentro de sus países para 2050. Y, contrariamente a lo que se piensa, no solo tienen lugar en zonas empobrecidas.
¿Qué se entiende por refugiado climático?
Según el Informe de Comisión Española de Ayuda al Refugiado, se recoge por primera vez el término de desplazamientos climáticos en 2019. Se define como la movilización causada por cambios repentinos o progresivos en el entorno debido a los efectos del cambio climático. Beatriz Felipe, socia cofundadora de CICrA Justicia Ambiental, puntualiza que se llama “refugiados climáticos” a aquellas personas obligadas a abandonar su país de manera forzada, “personas que preferirían no marcharse, pero, en algunos casos, el precio de no hacerlo puede ser incluso la vida”.
Debemos subrayar que las causas ambientales desencadenan las condiciones económicas, sobre todo en sociedades rurales que dependen directamente de la agricultura.
Actualmente, es muy complicado obtener una estimación exacta con los datos de las cifras reales de las personas desplazadas por motivos climáticos. El Centro de Monitoreo de Desplazamiento Interno (IDMC) es la única organización que investiga sobre los datos de desplazamiento interno asociado a desastres naturales. En 2022 se produjeron 2,6 millones de nuevos desplazamientos, sumando a 32,2 millones de movilizaciones incitadas por cambios climáticos.
Las migraciones climáticas no solo tienen lugar en países empobrecidos
El informe publicado por la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) y Greenpeace deja claro que estas movilizaciones no solo tienen lugar en países con pocos recursos económicos. También se trata de desplazamientos internos o migraciones regionales. Desde Greenpeace declaran: “Numerosos desplazamientos que están teniendo lugar en regiones como California debido a los incendios forestales y la sequía”. Señalan y documentan uno de los casos de refugiados climáticos más graves, que sí tiene lugar en una economía vulnerable, la situación en la isla del pacífico Vanuatu, tal y como se reporta en este mismo informe: «Huir del Clima».
El agua y la desertificación: los dos factores que presionan a los refugiados climáticos
INFOVERITAS ha contactado con la socia cofundadora de CICrA Justicia Ambiental, Beatriz Felipe Pérez, experta en migraciones climáticas, para ayudarnos a comprender mejor las causas que hostigan la vida de las personas obligadas a llevar a cabo estas movilizaciones medioambientales. “En 2022, las inundaciones y las tormentas fueron los desastres que más desplazamiento interno generaron, según datos del IDMC. La sequía fue el tercero, dando lugar a 2.215.000 millones de nuevos desplazamientos”, explica Beatriz Felipe.
La contaminación mata
Los índices de contaminación siguen en aumento y obligan cada año a miles de personas a abandonar sus territorios. Contrariamente a lo que se piensa, la contaminación mata. Raquel Montón, responsable de la campaña de Incidencia de Greenpeace, revela que solo la contaminación atmosférica es responsable de 23.000 muertes en España en 2020. En el artículo publicado por la Agencia Medioambiental Europea (EEA) se puede comprobar que ascienden a 25.500, motivado por el material particulado respirable (PM2.5) presente en la atmósfera de las ciudades (polvo, cenizas, hollín, partículas metálicas, cemento y polen, entre otras). “La contaminación del aire es una causa conocida de cáncer en Europa; en particular, el cáncer de pulmón” (EEA, 2022).
El uso de productos químicos contribuye a la degradación de los ecosistemas y la biodiversidad. Asimismo, los pesticidas también son un agente incipiente de contaminación. “Son intrínsecamente dañinos para los organismos vivos”, informa la EEA. La exposición humana a las sustancias químicas causa cáncer, perturbaciones en los sistemas respiratorios, cardiovasculares o inmunitarios, en general, e incrementan nuestra vulnerabilidad frente a las enfermedades. Y también provoca desplazamientos.
¿Qué se espera para los próximos 50 años?
En España estamos experimentando casos de desplazamientos internos. Beatriz Felipe expone con los ejemplos de la erupción del volcán de La Palma o la situación en el Delta del Ebro: “La limitación de la llegada de los sedimentos debido a las represas junto con la elevación del nivel del mar pueden hacer que la población local tenga que marcharse”, indica la experta.
Es necesario que se siga llamando la atención a la población para transformar el sistema económico, dirigir la mirada a una economía circular, social y solidaria. En algunos contextos hay una alta probabilidad de que aumente el número de personas que deban abandonar sus hogares debido al intenso impacto de la crisis ambiental, explica esta experta.
Fuentes y herramientas
Declaraciones Raquel Montón, responsable de la campaña de Incidencia de Greenpeace
Declaraciones de Beatriz Felipe Pérez, socia cofundadora de CICrA Justicia Ambiental
Informe de Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) y Greenpeace: Huir del Clima
Página web del Centro de Monitoreo de Desplazamiento Interno (IDMC)
Página del Ministerio de Transición Ecológica y reto demográfico
La última edición de la serie de informes Groundswell del Banco Mundial, el cambio climático podría obligar a 216 millones de personas a migrar dentro de sus propios países para 2050